sábado, febrero 26, 2011

Salvavidas con K

Salvavidas en medio de la nada,
así te denomino;
tierra firme luego de un naufragio,
así eres.

Borracho y alejado de la nave
que alguna vez tomé,
caí solo, entre tanta estupidez,
fue culpa mía el no renunciar,
nadie me obligaba a seguir.

Donde empezar,
en estrellas de gas
donde no puedo pisar,
en oxígeno limitado y ansias interminables
no puedo seguir.

Mi empresa, mi auspiciador
ya no confía en mí, ya no soy rentable
y aunque nunca fui partidario
de esas políticas de capital,
caí tontamente, de nuevo.

Soy una víctima, soy mi víctima;
no hay más culpa que la mía,
soy consciente de eso.

Y entonces cuando hundido,
resignado sin saber nadar sabiendo nadar,
olvidando mis recuerdos
a 10 imágenes por minuto
es que te encuentro,
sin buscarte te encuentro;
así es más placentero.

Fue sin dudarlo que te quise conocer,
cuando ya no quería conocer,
y las excepciones son más dulces.

Y tú eres más dulce,
más completa y única en su especie,
alguien que me quiere,
alguien que tengo.

En estas estaciones de ternura apagada,
es que la rutina enciende
su lado más oculto,
pegada al sentimiento
es que le encantas y se encanta
aferrada a su cultura,
aferrada a tu confianza,
se deja caer buscando que la atajes...
es una tarea difícil,
pero ya la retuviste,
quizás sin pensarlo,
quizás sin quererlo,
pero ya no muere sin sentido.

Y tu eres más dulce,
y ya no me da alergia
el pensar que quiero querer
tanto o más de lo que he querido.

miércoles, febrero 23, 2011

Pueblo fantasma

Nuevas paredes, nuevos condominios
en mi mente llena de lagunas,
de incendios y bosques.

No hay habitantes aquí,
vivo solo sin más que comer.

Es culpa mía, es culpa mía;
no es preciso el denunciarme,
son terrenos privados.

No hay habitantes aquí,
maté al resto con un par de sustancias.

martes, febrero 22, 2011

Plaza de armas

Quiero ir a la plaza
y comprar un helado en compañía,
aunque sé que cuestan caros
es una tradición,
lavarme las manos en la pileta
llena de suciedad, de otras manos,
comprar una pulsera,
discutir religiones,
ignorar estatuas ralladas
y en cualquier antro una cerveza,
son muchas las personas para compartir aquí.
Ver la cartelera del teatro,
envidiar a los enamorados,
reírme de la gente apurada con corbata,
decir que no tengo monedas, irme al infierno,
mirar de reojo el capital
en la puerta de la iglesia,
cotizar los remedios,
elegir algún banco,
robarlos todos; aquí son todos falsos.
En una banca iniciar un desquite,
en un árbol ser como todos
y escribirle otro par de nombres
sin recordar que ellos son más eternos
que un simple humano
que no sabe ni lo que es.
Cuando me amenazan, paralizan la billetera
y la retiran del bolsillo...
hay que entender, es un trabajo
muy respetado aquí.
La cámara se ríe de mí,
pienso que me observa
pero están todos durmiendo,
mejor vuelvo a lo mío
que dejé en la banca expectante,
me hace sentir importante
en esta pequeña ciudad.

Placer culpable

La playa es ancha y extensa,
llenas de cuerpos mojados
y un paraíso visual para cualquiera.

Aterricé ahí para pecar,
no importa si no soy un conquistador,
alguna caerá.

Vivimos en el placer,
obviando el vivir normal.

La vida es larga y bella,
pero la hacemos corta y llena de líquido;
no es tan correcto,
pero ya estoy acabando;
mañana quizás piense.

lunes, febrero 21, 2011

Enfermo

Estaba enfermo.

Y fue a una consulta médica.
Le recetó pastillas y una hora
de ejercicios diarios.

Y fue a un psicólogo.
Le recetó pastillas e irse de vacaciones
por un mes.

Y fue a un partido político.
Le ayudaron a denunciar al gobierno
por ineficiente.

Y fue donde su amigo.
Le dio un libro, música docta, algo de trova
y unas cervezas.
Y se sanó.

Las recetas caseras son
las mejores para los dolores del alma.

Cada fruta en su cajón

Un atleta en puntas de pies
bailando ballet es asqueroso,
es asqueroso.
Nuestra mundo no lo permite.

Un bailarín de ballet
en zapatos con toperol es inaceptable,
es inaceptable.
Nuestros dirigentes no lo permiten.

Cada fruta en su cajón,
no queremos comida sana.

Escaleras

Camino y me río,
corro y me caigo.

No es un camino duro,
mis zapatillas están gastadas,
no estoy en forma
y hay muchos escalones.

Se aprende a palos y a caídas.

Tú no aprendes nunca.

Y tu crítica de mierda
que no ayuda en nada,
mirando tras una muralla la televisión
creyendo obviar al mundo,
queriendo parecer insensible
y coartado y asqueado
y acomodado y vomitado.

Las escalas las subes igual
y te crees superior,
porque vives en la llanura.

Pero de eso se trata la vida.

miércoles, febrero 16, 2011

Don Facundo

Protagonista de una historia
pulida y falsa de un canal fantasma
aparece don Facundo,
un campesino empresario
dueño de fundos y chacras
con muchos hijos y mujeres,
un ejemplo a seguir.

Con facha y pasión se desata
y mata a cinco de sus mujeres,
vende una chacra,
pero entierra sus cuerpos ahí,
antes de entregar los papeles.

Don Facundo, con su facha
y tierras disponibles
sigue plantando cabezas
de chanchos.

¡Es un ejemplo a seguir!

Eso es cultura.

A 370 kilómetros de la trasmisión
vive don Facundo,
sin televisión ni dinero para comprarla.
3 hijos y una mujer de toda la vida,
estas cosas no son como las pintan.

domingo, febrero 13, 2011

Cupido

Suelo no creer en Cupido,
quizás culpándolo de mi mala suerte
o de mi ineficacia a la hora de no estar solo.

Hoy se presenta como un
maldito gordo con alas con arco y flechas,
siendo que en el siglo 21
todos tienen piel dura,
flechas que atraviesan solo a un par de sensibles
afortunadamente equivocados;
e insisto que en el siglo 21
si no se tiene un alto calibre
no matamos ni una miserable idea.

El cupido moderno,
camuflado, cruel y vendido
disfrazado de dinero y armas
y tanques y bombas
ataca más a la pinta del monstruo.

Es tan poderoso que revienta
la cabeza de aquellos que su arma apunta.

Antes de amor morían,
ahora por amor mueren, sin amar siquiera.

Y lo escribo en la soledad de mi habitación,
acostumbrado a no celebrar
lo que ellos celebran.

Y no me siento mal.

O quizás sí, pero no lo necesito.

Pero soy un idiota común
que le gusta lo que lo hiere,
masoquista enamorado sin amor.

Noche de playa (Altas mareas)

En estos lugares de mierda
donde escribimos en la arena
nombres que las olas borraron
a penas emprendimos la vuelta,
sin avisarnos, sin preguntarnos
es que uso el reflejo de la luna
para crear un nuevo horizonte,
ampliando mi tierra a merced del mar.

Y creo ser dueño de esto
en compañía del nombre que ya borró
la naturaleza.

No saco nada con maldecir al mar.

Él no fue el culpable de lo inevitable.

sábado, febrero 12, 2011

Relieve

Sahumerios y pretéritos
de olas secas en la playa
del litoral de mi antigua geografía,
con carreteras vacías
y expeditas.

Sahumerios y pretéritos,
sahumerios y pretéritos

que recuerdo puntas azules
y agua cayendo a través de canales
de cemento, enjaulados
en falsos testamentos
en lo alto de cimas
donde también caen las lágrimas
quemadas por molestia
y movimientos de placas.

Choques y sahumerios.

Humo entre geografías,
no se logran conectar
ni convivir.

Países

Encerrados en sus círculos
y porciones de tierra, comienza la caza
dentro de sus propias reglas,
un pequeño país dentro de otro
y así sucesivamente
se va desvaneciendo la autoridad del autoritario,
sin darse cuenta que cada país interno
se rige por el mismo dictador;
se parecen más de lo que creen.

jueves, febrero 10, 2011

Náufragos

Puertos oscuros, barcos varados,
náufragos alcohólicos y globos salvavidas,
todos aferrándose a la vida,
sin saber que cada uno
mata a otro.

Faros contrapuestos,
en pleno apogeo de avistamientos
los capitanes suelen confundir.

Belén está más cerca,
Jesús es más terrenal
y María Magdalena hasta en la sopa,
buscando a la madre virgen.

Cruces y constelaciones
los llevan al mejor de los lugares;
a ninguno.

Pastillas de la felicidad

Lo tóxico y lo intoxicado
buscan remedios bajo la cabina.

¿Quiere descuento?

¿Es socio?

Tarjeta de crédito,
le pasan drogas legales,
le pintan la cara de niño domado feliz,
es tan amarilla...
es tan computacional...

Por ver cosas reales
lo mandan a buscar unicornios azules
de un Silvio falso,
el real se quedó en el mundo
de los felices ilegales.

Elecciones

Protuberancias y calles quebradas
por el peso de la inmune conciencia
del alcalde de esta ciudad.

¡Vienen elecciones, regale calendarios!

Y si no vota, mámese un helado.

miércoles, febrero 09, 2011

Juicio

Me divierto viendo como caigo
en laberintos y piscinas llenas
de remordimientos
encadenados al fondo,
donde encuentro el paso al
profundo mundo
del olvido
del cual no he de salir.

Me fui un día, pensando escapar
de mí
y de unas cuantas representaciones
de diarios matutinos
con portadas acusatorias,
que insistían
en culpar al más débil.

Siempre fueron los mismos
los que escribían las noticias.

Y la culpa es de
la vida.

martes, febrero 08, 2011

dios cruel

El amor es un juego de niños
que los niños no saben jugar,
y no es un juego de mesa que pueda comprar,
ni canciones que pueda descargar,
pero sí es un Dios abstracto
lleno de orificios donde respirar
y ahogar, en efecto retroactivo,
al ilustre visitante.

Si son cabinas numeradas,
si muchos creen llegar sentados ahí,
¿quién tiene la verdad?

De donde buscamos sinceridad,
encontramos adornos literarios,
entonces las rimas
y chocolates le abren las piernas
a la ternura, conviertiéndose
en la orgía más perversa.

El amor es un dios cruel,
me lo imagino con su rayo en la mano
eliminando a aquel que no trabaja
forjando su estatua.

Y muchos mueren en el trabajo,
otros se convierten en faraones
en tierra de nadie.

Yo observo todo el movimiento de la ciudad.

Me parece tenebroso
y prometo no acercarme
al insoportable olor a azufre.

Cuando caigo por un latigazo:
los ángeles golpean las espaldas
esperando terminar los turnos.

Y es un ladrillo muy pesado,
pero drogado camino
hasta el tope, donde pongo mi piedra y me lanzo al vacío.

Ahora sí conocí al dios,
en la vida eterna entonces
si hay un para qué sufrir.

Cuando veo tierra firme en el fondo,
hay motivos para afirmar
que no quiero paracaídas.

Un oasis de felicidad,
o sigo trabajando en el desierto.

Pesadilla

Seguro de estar seguro
me siento ajeno a mí.

No dependo de mí, en absoluto.

Las cosas que hago por mi cuenta,
terminan por ser desprecio y desaprovecho
del aire en flor.

Y entonces pienso si es que
es infame el estar tanto tiempo regalando mi contrato,
pero no es más infame
que soñar con Pinochet.

Freddy es una alpargata.

Olvido

Hay frente a mi un memorial.

No está escrito, es un pedazo de mármol.

Acaba de morir hace un par de años.

Primera y tercera

Y entonces sonará una pendejada,
que son cuentos de niños,
que son bailes infantes.

No creo eso, es más profundo.

En la vida se aprende
que es un viaje de ida y vuelta.

Se nace dependiente,
se termina dependiente.

Y entonces sonará una pendejada,
pero a los 80 años
mi madre no está para cambiarme los pañales.

Alacrán

Tu cara de dependencia,
de diente de leche
no la soporto, siendo que no es leche
sino vicios, cientos de vicios
esparcidos en tu casa, en tu baño
y en tu cama, si es que tienes cama.

La misma donde dormiste
con cientos de mujeres.

¿Recuerdas aquella que yo recomendé?
No, no era mujer.

¿Lo recuerdas?

Y si no te conozco,
no tienes cama y no era lo que esperabas

qué mierda haces entonces
a las 3 de la mañana aparentando estar presente
en tu noche de lujuria, de éxtasis,
de plásticos cementerios,
de bolsas biodegradables que te frenan.

No amas la naturaleza,
harías lo posible por destruirla
sólo para hacernos sentir mal.

No amas a nadie, pero viven cayendo tras de ti
cientos de moscas
que te prefieren a ti en la totalidad de su día de vida.

¿No haz visto ese acto de amor?
¿No haz tenido con ellas?

Chispa

Empiezo a echar bencina
a todo el sendero
del hogar hasta el final.

No hay fósforos.

Una chispa divina incendia todo.

No hay hectáreas menos,
no hay personas sin hogar,
sólo hay un cuerpo quemado.

Era la solución.

Inocencia

Fantasmas, espasmos de piel
y esqueletos amorfos de alguien que conocí
y que la muerte transformó.

y es entonces
que la muerte es más inocente que la vida,
es entonces otro el motivo de su deformidad.

yo la descuarticé,
solía conocerlo.

Predecible

Predecible, atrapando
en caminos oscuros
brujas y animales humanos extintos
y un ave defeca en mi camisa.

Muy predecible.

El ave fénix me eligió a mí.

Adivino

No sé si estoy respirando,
esta cosa escribe sola panteones
oxidados.

No sé.

lunes, febrero 07, 2011

14 de Febrero

Con nuevos caminos, nuevos desvíos,
detenidos echando bencina
cerca del último peaje
(el más caro por lo demás)
pensamos en despedirnos,
piensas en despedirte.

Me destroza,
y no el seguir solo,
y no el miedo a mí mismo,
y no el terror a los intereses,
y no el temor a lo que me deparan;
es que no confíes en mí.

Cuando tengo la mejor excusa
para volver seguido
a la misma estación
a recargar mis ganas,
a buscar motivos,
a recordar que finalmente
no puedo solo
y que estando lejos
prolijamente no estoy tan lejos,
porque pertenezco a acá.

Acá, aquí.

Es siempre más seguido
la inseguridad, no es fácil.

Y es aquello que se sabe,
que se entiende y no entiende,
lo entendemos o compartimos
que acá las cosas no me pertenecen,
no te pertenecen;
es que nos pertenece.

Inseguridad de nuevo,
no es fácil, lo sé.

Que es mejor no creerme,
que te podría decepcionar,
que no volveré,
que no quiero volver,
que voy a olvidar.

No conozco el futuro,
ni conozco plenamente todo lo que viene;
pero no le tengo miedo a aquello,
no voy con motivos de desperdiciar,
voy a lo que va la vida;
y sigo perteneciendo
a donde mismo he pertenecido siempre.

Y vuelves presa de tu inseguridad.

Créeme, te lo pido.

No es una promesa falsa,
cuando uno de verdad quiere cumplir
las viñas prosperan
y el vino es más dulce.

Y si he llegado hasta aquí,
he llegado porque amo
y si amo es porque espero,
y si espero pacientemente
es entonces que te amo.

Son riesgos que hay que asumir,
que estoy seguro de esto,
que lo sabes más que nadie
que no te quiero ver sufrir,
y es un desafío que acepté y acepto
sin más letra chica
que un silencio sin necesidad de palabras
de estar contigo.

Y que no hay más que tú
cuando tú estás,
y si eso es mi motivo,
no lo quiero perder;
y si lo pierdo, es entonces
que sobrevivir a mí
me será más difícil que aceptar
que llevo 53 años esperando
gritar, deseo que no cesa.

Y tú tranquila,
sé que es difícil,
pero entiende que no estás sola
que no estarás sola.

Que si voy es porque amo,
que si vuelvo es porque amo,
que si escribo es porque amo,
que si insisto es porque amo y quiero.

Ya no creo en los juegos de niños,
y es entonces que todo es verdad;
tan verdad como que estoy aquí
completamente semi completo
esperando que me esperes
tanto como te espero.

Que si vuelvo es porque quiero volver

y por ti

miércoles, febrero 02, 2011

En la corte solitaria unitaria

En síntoma de rebeldía
me niego a vivir.

En señal de autenticidad
me niego a morir.

Mesa

En la noche, cierra los ojos
se vive mejor acá adentro.

De una monotonía de momentos
de ternura y exabruptos de amor,
donde siempre se toca cielo
y nunca se llega a él,
intentas dormirte, pero lo hago primero.

Y no duermo, más despierto que nunca
aparece en una típica tarde
de sana entretención
aquella que nunca conocí.

Y entonces amo el pecado.

Una bosta en los deportes,
pasar a otro tema es idóneo.

Tirada en la mesa,
cambiamos el redondo plástico
y planchas de madera
por piel y placeres naturales
y todo es muy real.

No había pensado tanto en la perfección,
creo que fui premiado
por la mediocridad.

Y entonces tus ojos penetran,
tu talento que me humilla
y no me importa,
hoy no importa aquello.
Tus morenos cabellos, tu tez blanca
y tu perfecta simetría,
tu perfecta escala,
tu perfecta proporción.

No pensaba que un movimiento
iluminara más que una estrella cercana.

Tu ropa cae y no es mi persiana americana.

Te contemplo expectante,
jamás vi tanta perfección.

No soy inmoral, soy un simple mortal
y hay cosas irrenunciables.

Entonces la mesa es la perfecta ocasión,
el lugar soñado,
no hay más mundo que ella.

Labios de plata,
no hago zoom,
ya están lo suficientemente cerca
y con sabor al más dulce licor,
embriagarse es fácil
borrarse es seguro,
pero tu no desapareces.

Y el éxtasis de la magia
caminando en jardines botánicos,
pisando nubes, mientras abajo llueve
no necesito más,
está el baño de la luna.

Y termina el viaje,
tan eterno como onírico.